A pesar de que los jóvenes en la actualidad están mucho mejor preparados que sus padres, tienen mayor acceso a la educación, tecnología y la mayoría de ellos han pasado por intensos procesos de urbanización, encuentran al final de su preparación académica una situación económica donde no necesariamente cuentan con suficientes oportunidades de empleo.
Esto abre nuevos retos y oportunidades para la generación venidera, ya que a pesar de ser difícil encontrar un trabajo que se adapte a las expectativas de los jóvenes, ahora más que nunca se cuenta con un entorno de oportunidades muy relevante para poder crear fuente de empleo creadas por cada sujeto, es decir, oportunidades para el autoempleo.
El éxito de el autoempleo descansa en compaginar tres cosas de la mejor manera: lo que sabes hacer, con una forma novedosa de hacerlo y localizar a personas que estén dispuestas a pagar por tu tiempo y conocimientos.
Los buenos resultados dependerán de muchos factores, entre los que se encuentran: una firme actitud emprendedora combinada con la creatividad y automotivación, así como gran capacidad de respuesta a diversos aspectos de tipo social y del medio ambiente que tienen que ver con el desempleo.
Con ingenio, persistencia y un poco de suerte, puedes descubrir cómo convertir tus pasiones e intereses en algo que te brinde cantidades adicionales de dinero y una amplia satisfacción personal.

